Fixed Open Blade Knives Fatality Report – Spanish

‘Eso no es un cuchillo’: el apuñalamiento accidental no es culpa del empresario

Un contratista de movimiento de tierras ha sido demandado por una puñalada del hijo del propietario a un compañero de trabajo en una obra de Redbank Plains durante la pausa del almuerzo.

Joshua Boon, empleado contratado en la obra civil de Downer EDI en Highbury Drive, que manejaba una máquina de pavimentación de asfalto, reclamó una indemnización de 200.000 dólares por la herida.

La herida se la infligió Tim Sommerfeldt, conductor de un bobcat del subcontratista de Downer Big Bill’s Bobcats, propiedad de su padre Bill.

El 16 de septiembre de 2011, ambos se tomaron su descanso para comer en una loma de hierba adyacente a la obra. Summerfeldt estaba utilizando la hoja de su multi – herramienta Leatherman -que tenía 18 cm completamente extendida- para pelar una naranja. Cuando se levantó de una posición agachada, con la hoja y la naranja en la mano, Boon se acercó.

Ese movimiento inocente provocó la desafortunada penetración de la hoja “extremadamente afilada” en la mano izquierda de Boon.

Boon demandó a Big Bill’s por su lesión -y las tres rondas de cirugía resultantes- alegando que había permitido que el personal llevara al lugar armas peligrosas, como el “cuchillo de 9 pulgadas” con el que creía haber sido herido.

Aceptando que el “arma” no era otra que una Leatherman -que contenía, entre otros dispositivos, alicates, destornilladores, una lima y una sierra que tenían aplicaciones cotidianas en la obra-, Boon sostenía, no obstante, que Big Bill’s debería haber aplicado medidas suficientes que limitaran el uso de tales herramientas para garantizar la seguridad de los compañeros de trabajo y de otras personas.

Debido al peligro potencial de la cuchilla afilada, argumentó, Summerfeldt (de quien afirmó que Big Bill’s era también responsable subsidiario) tenía la obligación de asegurarse de que la cuchilla se retirara siempre que hubiera riesgo de contacto físico.

Al fin y al cabo, Summerfeldt había subido desde la posición agachada con la hoja extendida sin comprobar si había alguien en las inmediaciones que pudiera resultar herido por esa acción.

Sin embargo, fue Boon quien se acercó a Summerfeldt y debió verle levantarse, observó la jueza Ann Lyons en el juicio de tres días celebrado en el Tribunal Supremo de Brisbane.

“El accidente no se produjo simplemente porque Summerfeldt tuviera un cuchillo en su poder”, dictaminó la juez Ann Lyons en el Tribunal Supremo de Brisbane, “sino porque Boon se había acercado mucho cuando lo utilizó para pelar una naranja”.

Aceptó el argumento del acusado de que había actuado de forma razonable y que el riesgo de lesiones por “levantarse en el acto” era insignificante. “Ninguna persona razonable en su posición habría tomado precauciones adicionales”, escribió en su sentencia de 25 páginas.

La reclamación de Boon de 200.000 dólares fue rechazada y se le condenó a pagar las costas legales de Big Bill.

Boon apeló y el 26/02/2016, los jueces de apelación revocaron la decisión de la jueza Lyons debido a una “conclusión ineludible de que había un riesgo previsible de que un transeúnte pudiera haber sido golpeado por la hoja del cuchillo”.